He vendido frutas y verduras desde ya varios años, antes de iniciar con FUNDAP no contaba con suficiente capital de trabajo para la compra algunos productos, mis ganancias eran muy limitadas y por ello no podía cubrir la demanda del mercado.
Viajaba desde Retalhuleu hacia Quetzaltenango para poder adquirir mercadería o vender algunos productos sin embargo con la llegada del Covid-19 restringió muchas de las actividades que realizaba para poderme movilizar y vender mis productos por ello con ayuda de mi hija decidimos incursionar en nuevas fuentes de ingresos, en el lugar donde vivíamos las tiendas o abarroterías eran muy escasas aprovechamos este nicho de mercado y en sociedad con mi hija invertimos en una tienda de consumo diario y venta de frutas y verduras.
FUNDAP nos a apoyado con 6 créditos continuos para la compra de mercadería e insumos de consumo diario para la tienda. He recibido acompañamiento, asesorías y capacitaciones para llevar un mejor control en mis ingresos y gastos, así también recibí consejos para mejorar la forma de presentar mis productos que tienen promoción y sobre la forma de ordenarlos en la estantería.
Ahora me siento una persona exitosa y responsable porque gracias a los ingresos que genera mi negocio he podido cancelar puntualmente mi crédito y llevar alimentos a mi hogar. También me siento un hombre emprendedor, perseverante y feliz porque incluí nuevos productos en mi tienda, pero sobre todo que puedo trabajar junto a mi hija.
Agradezco a la Fundación por el apoyo brindado, ya que el mismo me ha servido para hacer crecer mi negocio y con las ganancias he podido sostener económicamente a mi familia, gracias muchas gracias por todo lo que hacen por nosotros.